Carta al Director: ¿Son ladrones buenos o ladrones malos?

Los Carabineros, ante la presencia de un hecho delictual que están cometiendo malhechores, deben preguntarles: ¿Son ladrones buenos o ladrones malos? ¿Y la misma pregunta debe hacerles a los ladrones del comercio, de bancos, de vehículos, de maderas, del cobre, de camiones con mercaderías, etc?.

¿También deben preguntar lo mismo, antes de actuar, a los que queman las siembras, los bosques, las maquinarias, iglesias, escuelas, transporte escolar, etc? .

Por supuesto, no deben quedar fuera de este interrogatorio, los narcotraficantes armados que buscan a sus rivales territoriales para asesinarlos, sin importarles las personas inocentes, que por desgracia, se encuentran entre las líneas de fuego.

En este grupo también están los sicarios, los coyotes, los captores y los que piden un pago mensual para “proteger” al comerciante. Ante todos estos hechos, los Carabineros, deben actuar con sicología social, pensando primero en los orígenes humanos de los que delinquen. Ahora, si actúan sin analizar, previamente los hechos, serán juzgados, despedidos o encarcelados.

En los hechos reales, muchos Carabineros han sido asesinados, acorralados por turbas, recibiendo en sus cuerpos bombas molotov y tuercas de fierro lanzadas con hondas. Los que los atacan son hordas de delincuentes políticos preparados para aplastarlos sicológicamente, inclusive, disparando contra los cuarteles policiales.

La única solución es el respaldo del Gobierno con leyes carcelarias, sin apelación, a 20, 30, 40 y 50 años de cárcel efectiva.

Analizando información internacional, en la dictadura de China Comunista, no existen malhechores, comos los descritos anteriormente. La gente se puede desplazar a toda hora sin que jamás sea asaltado.

La verdad que ningún ciudadano chino es dueño de su vida. Es el precio que deben pagar por vivir bajo un régimen totalitario. El que comete un hecho delictual no tiene, por Ley, un abogado que lo defienda, sólo viene la sentencia y el delincuente simplemente desaparece de la vida cívica.

En cambio, en la Constitución de Canadá, hay un Cuerpo de Carabineros, preparados para ir al colegio que le corresponda a cada uno de ellos a enseñar a los niños las leyes que se aplican fuera de sus escuelas, con sus deberes y obligaciones. Los alumnos conocen su Guía, con todos los datos personales. Es el líder de ellos.

                                 Carlos Covarrubias Carmona

                                         Pensador Elquino

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