Traer a la memoria
el trueque, antiguo sistema de intercambio de productos sin dinero de por medio,
así como rescatar antiguas tradiciones de pueblos originarios, fue lo que se
produjo en la ceremonia que se desarrolló en la escuela intercultural Juan
Torres Martínez de Diaguitas: la cuarta versión del Trafkintu, intercambio de
semillas y plantas, rito propio de la cultura local ancestral.
Diego Pillancar
Antigual, educador tradicional mapuche de esta escuela, expresó que esta
actividad es una instancia para educar y con ello transmitir valores y
conocimientos tanto a la comunidad como al estudiantado, pues “busca generar el
intercambio entre las comunidades y los mismos niños, que aprendan a
intercambiar sin el dinero sino en un acto de reciprocidad entre ellos mismos,
intercambiar semillas y plantas, y saberes, porque va relacionado con el
conocimiento de cómo se planta, en qué fecha, qué abono, qué agua, que cantidad
de sol, ese conocimiento también tiene que ir asociado a lo que uno está
intercambiando” aclaró Pillancar.
Este tipo de
enseñanza que conecta a los estudiantes con la tierra genera positivos efectos
y complementa el aprendizaje, pues una de las acciones es el cultivo de
semillas, que los estudiantes realizan tanto en sus casas como en la huerta
escolar. Martina Arqueros, estudiante de 3ero básico, valoró este intercambio
señalando, “así todos podemos cambiar semillas y todos tendremos diferentes
tipos”, en tanto Julieta Zambra otra de las alumnas, le gusta estar en el
colegio porque “hay muchos niños para jugar y son todos buenos compañeros y tenemos
una huerta”. Isidora González también
disfruta el espacio y considera positivas estas iniciativas, “me parece bien
que nos enseñen de las semillas, porque así tenemos más experiencia y cuando
seamos grandes podemos contarle a otra persona y podemos plantar en la huerta”.
Fresia Flores,
encargada de convivencia escolar y profesora de ciencias en el primer ciclo
básico explica que el trabajo que realiza Diego Pillancar como educador
tradicional mapuche se realiza los días jueves. “Él nos enseña saberes y
conocimientos ancestrales que recibió de su familia y lo plasmamos en el
curriculum en las horas de clases, sobre todo el día jueves, y además
desarrollamos nuestro proyecto institucional donde se valora el cariño y el
rescate de las tradiciones de nuestros ancestros, el amor y cuidado de la
naturaleza y sobre todo el respeto por cada uno de nosotros”.
Jorge Guerreros,
director de la escuela Juan Torres Martínez enfatizó que esta iniciativa ya es
parte de la comunidad diaguitana, “está estrechamente relacionada con nuestro
proyecto educativo, de relacionar, de rescatar, de respetar las tradiciones de
nuestros ancestros y que mejor que nuestros alumnos sean parte de todo este
proceso (…) es algo que nos identifica a nosotros como establecimiento en cada
una de las actividades, aquí son los profesores, los asistentes, los
apoderados, los alumnos que participan, por lo tanto eso es algo que identifica
a nuestro establecimiento y con lo cual nos sentimos muy orgullosos, porque hay
una verdadera compenetración de lo que se está realizando”.
El alcalde de
Vicuña Rafael Vera valora como la sociedad y los estudiantes desde temprana
edad, se preocupan de generar acciones para el cuidado del medio ambiente
también, “ver como ellos sienten que la tierra es importante, en esta acción el
cambio de semillas, y eso demuestra que podemos ser más respetuosos del medio
ambiente y de la tierra cada día, creo que una vez más es un señal que nos
llama a la reflexión de esta escuela tan notable para nuestra comuna que la
interculturalidad la vive, no es un titular, la vive día a día”.
En la actividad
estuvieron presentes además los concejales Cristian Pinto y Nelly Lazo y el
Core por la provincia de Elqui Javier Vega, quien nuevamente asiste a esta
ceremonia en la que ha participado en tres ocasiones. “Queda demostrado, como
los niños, niñas y adolescentes de este establecimiento educativo reconocen su
cultura, reconocen sus raíces, sus tradiciones y se realiza este Trafkintu,
este intercambio de semilla que lo que crea es una sociedad más solidaria”.
El Trafkintu, hace
referencia a un rito propio de la cultura ancestral, el cual acontecía al
momento que cada comunidad presentaba bienes a intercambiar. La situación
previa a este encuentro se daba cuando la comunidad que lo pedía, mandaba a su
werken (mensajero) a invitar a la comunidad, con la cual se realizaría el
intercambio. Esta forma de permuta permitía ponerse de acuerdo en las especies
a intercambiar lo que consolidaba la economía comunitaria pudiendo complementar
sus recursos con los de otras comunidades locales.
Con el tiempo esta
ceremonia ha experimentado cambios los que han permitido que se realice en
cualquier momento que se necesite intercambiar semillas o plantas, a partir y en torno a este evento, las comunidades de
distintos lugares se organizan durante el periodo de otoño y primavera, los
cuales coincidirán más tarde con las temporadas específicas de siembra.